FLUYE ... y aproxímate más a una vida feliz

“Fluir” es un estado mental y físico que alcanzamos cuando nos implicamos de tal forma en una actividad que perdemos la noción del tiempo y del espacio.

Este estado ha sido utilizado a lo largo de la historia por muchas culturas ( pensemos en el yoga o en el zen) e influye en el grado de felicidad que siente una persona. 

El estado de flujo puede alcanzarse siguiendo unos pasos y manteniendo una actitud mental adecuada. Y no sólo se da en situaciones especiales (meditación, deporte) sino en cualquier faceta de nuestra vida, como hacer la comida o reparar la bicicleta.

También nos puede animar a dar un sentido de flujo a nuestra vida entera, definiendo cuáles son nuestras metas tanto a corto como a largo plazo.

Las principales características fenomenológicas que definen la situación de flujo, son:

·                         Situación de reto o desafío.

·                         Focalización de la atención en la acción.

·                         Metas claras.

·                         Retroalimentación sobre la acción.

·                         Sentimiento de control.

·                         Despreocupación sobre uno mismo.

El profesor Mihaly Csikszentmihaly es quién más ha investigado en este tema y cuenta con numerosos estudios y libros. Algunas citas suyas:

"Para hacer el mejor uso de nuestro tiempo libre, tenemos que dedicarle tanto tiempo y atención como dedicamos al trabajo que hacemos. El ocio activo que ayuda a una persona a crecer no se produce fácilmente"

"Como ocurre con cualquier otra cosa, no se puede disfrutar de las relaciones sin dar nada a cambio. Debemos emplear una determinada cantidad de energía psíquica para cosechar sus fruto".

"Cuanto más rutinaria pueda ser una tarea, como puede ser lavar platos, vestirse o cortar el césped, más gratificante será si la abordamos con el cuidado que pondríamos en crear una obra de arte". 

"Tiempo es lo que hay que encontrar a fin de desarrollar el interés y la curiosidad para disfrutar de la vida por si misma. El otro recurso igualmente importante es la capacidad de controlar la energía psíquica. En lugar de esperar un estímulo externo que atrape nuestra atención, debemos aprender a centrarla más o menos a voluntad"

"Controlar la atención significa controlar como vivimos las situaciones y, por tanto, la calidad de vida"