En honor del cumpleaños del Dr. Randolph Stone, hoy ha sido considerado el día mundial de la polaridad.
lunes, 26 de febrero de 2018
domingo, 25 de febrero de 2018
Terapia de Polaridad y CORAZON. Expone Jim Feil
Otra preciosa aportación de la Terapia de Polaridad.
Primer video de tres sobre el corazón.
¡ Gracias Jim Feil !
CORAZON Jim Feil
Primer video de tres sobre el corazón.
¡ Gracias Jim Feil !
CORAZON Jim Feil
sábado, 17 de febrero de 2018
TODO ESTA EN TÍ
jueves, 1 de febrero de 2018
Complejo de Jonás o miedo a lo mejor de mí
¡¡Parece el colmo, pero....tenemos miedo hasta de nuestra propia grandeza!!
Abraham Maslow, psicólogo conocido por su pirámide de Necesidades también acuñó el término “Complejo de Jonás”. Lo relaciona con el pasaje bíblico en el que Dios encomendó a Jonás que hiciese llegar su mensaje a Nínive pero éste huyó no creyéndose capaz de hacerlo. Y con él se refiere a la tendencia de las personas a temer a su propia grandeza, a evitar el propio destino o a huir de sus mejores talentos.
Parece que siempre estamos temiendo lo peor. En algunas ocasiones, si hay algo que apunte hacia el fracaso, hay una dosis de lógica en esta reserva, pero la verdad es que también sabemos (¡bueno, creo que esto ya lo sabemos todas!) que nacemos con un gran potencial: un almacén de recursos, fortalezas, habilidades, aptitudes, dones y talentos que esperan ser utilizados.
Y somos nosotras y solo nosotras quiénes más nos limitamos habitualmente. Y así nos autosaboteamos y también nos sirve de excusa para apoltronamos en la zona de confort cuando ésta, en la mayoría de ocasiones, aunque conocida, no es nada confortable.
¡Comienza a navegar que ya ha llegado el tiempo!
Abraham Maslow, psicólogo conocido por su pirámide de Necesidades también acuñó el término “Complejo de Jonás”. Lo relaciona con el pasaje bíblico en el que Dios encomendó a Jonás que hiciese llegar su mensaje a Nínive pero éste huyó no creyéndose capaz de hacerlo. Y con él se refiere a la tendencia de las personas a temer a su propia grandeza, a evitar el propio destino o a huir de sus mejores talentos.
Parece que siempre estamos temiendo lo peor. En algunas ocasiones, si hay algo que apunte hacia el fracaso, hay una dosis de lógica en esta reserva, pero la verdad es que también sabemos (¡bueno, creo que esto ya lo sabemos todas!) que nacemos con un gran potencial: un almacén de recursos, fortalezas, habilidades, aptitudes, dones y talentos que esperan ser utilizados.
Y somos nosotras y solo nosotras quiénes más nos limitamos habitualmente. Y así nos autosaboteamos y también nos sirve de excusa para apoltronamos en la zona de confort cuando ésta, en la mayoría de ocasiones, aunque conocida, no es nada confortable.
¡Comienza a navegar que ya ha llegado el tiempo!
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